| |
CRIMEN EN
PRIMER GRADO
(High Crimes)
Estados
Unidos,
2001 |
|
Dirigida por Carl Franklin, con
Ashley Judd, Morgan Freeman, Jim Caviezel, Adam Scott, Amanda Peet, Bruce
Davison, Tom Bower y Juan Carlos Hernández.
|
Crimen en primer grado, la nueva película del director de Ni un
paso en falso (One False Move, 1992), es un thriller cuyo
principal atractivo reside justamente en que despliega correctamente los
elementos convencionales del género y a la vez alterna con el drama. La
identificación con la protagonista Claire Kubik nos introduce en una
historia en la que se juega algo más que la idea de "una mujer que se
encuentra en peligro": hay acción, tensión e intrigas; pero también emoción
y reflexión como contrapunto en esta trama densa que se nos va develando con
cuenta gotas.La vida feliz de Claire y su marido Tom
Kubik (Jim Caviezel) se ve amenazada cuando repentinamente él es acusado de
haber asesinado a nueve civiles en El Salvador y haber estado prófugo los
últimos quince años. Su verdadero nombre es Ron Chapman y, entonces, se
desempeñaba como agente secreto en una misión que buscaba a un terrorista.
La exitosa abogada interpretada por Ashley Judd, que ignoraba este pasado,
ahora debe enfrentarlo y defender al hombre que ama. Pero en la cárcel
militar que lo juzga los códigos son totalmente diferentes a los que ella
conoce y las reglas sólo se mantienen para favorecer a los poderosos.
Claire se alía a Charlie Grimes (Morgan Freeman), un ex
abogado militar rebelde y algo improvisado pero efectivo, que la ayudará a
pelear por la verdad. A lo largo del film se siembran una serie de indicios
que se van repitiendo y resignificando para que vayamos reconstruyendo los
hechos y sacando nuestras propias conclusiones. Investigaciones,
persecuciones y juicio de por medio, Crimen en primer grado
entretiene con su ritmo sostenido y va ganando interés a medida que se
suceden los acontecimientos y giros en el relato que suman y sorprenden.
Además de las intrigas políticas que se van desentrañando en la historia,
Franklin delinea a sus personajes como algo más que actores de unas cuantas
secuencias de acción. Esto aporta otras variantes dramáticas que contribuyen
a la trama, como por ejemplo el deseo de Claire de quedar embarazada antes
de que el pasado irrumpa en su vida; las constantes dudas sobre la identidad
de su marido; su futuro laboral en jaque; la lucha contra el alcoholismo de
su compañero Charlie y la amistad que ambos van forjando. En definitiva, una
fórmula conocida que Hollywood suele reflotar pero que, sin grandes
hallazgos, en manos de este director resulta efectiva y entretiene.
Yvonne Yolis
|
|